Breve Historia de la Hermandad
La Hermandad de la Santísima Virgen de Gracia es la principal de las corporaciones religiosas existentes en la Ciudad de Carmona, de la que la Sagrada Imagen es Patrona.
Los orígenes de la Hermandad se remontan al año 1948, por lo que podemos decir que es una hermandad relativamente reciente, no así la devoción de los carmonenses por la que es su madre y patrona, ya que desde su hallazgo en 1290 los fieles veneraron a la Virgen, primero en su ermita y, posteriormente, en la Iglesia Prioral de Santa María.
La no existencia de una hermandad con anterioridad, como explicaba D. Francisco de Paula Carrión Mejías, redactor de las primeras reglas, se debe a que “ha sido tan inmenso y fervoroso el amor de los hijos de Carmona a su Patrona que han estado tan dispuestos a atribuirles cultos y han procurado la máxima solemnidad de ellos que no ha hecho necesaria una Hermandad para fomentar la devoción y el culto a la Virgen de Gracia”. Era el pueblo con el ayuntamiento a la cabeza y a las órdenes del clero quien se ocupaban del culto a la Patrona. Continúa diciendo que “siendo la devoción a la Virgen en Carmona exactamente la misma no son las mismas las circunstancias; la falta de clero, la reducción de número de parroquias, la mayor población de Carmona y la mayor carga de trabajo de los sacerdotes imposibilitan a estos ocuparse por sí solos de todo lo relacionado con el culto a la Santísima Virgen”.
- Extracto documental de las primeras Reglas de la Hermandad
Los motivos explicados hacen necesaria la creación de una Hermandad y, por ello, se erige canónicamente la Hermandad el día 18 de marzo de 1948, mediante decreto del Vicario General del Arzobispado de Sevilla bajo el nombre de “Hermandad de la Santísima Virgen de Gracia, Patrona de Carmona”. Tras ello, se aprueban las reglas de la hermandad y se convocan las primeras elecciones.
En los primeros años cabe resaltar una importante labor social ante las necesidades existentes en la sociedad carmonense. Es de destacar la construcción de las viviendas sociales “Virgen de Gracia”, que se pudo sufragar gracias a la venta de unas tierras propiedad de la Hermandad. Entre 1965 y 1966 los hijos de Carmona residentes en Cataluña acuerdan crear una Hermandad filial allí y se les envía una Imagen de la Virgen.
En la década de los años 70 hemos de destacar que en el año 1972 se celebran las Bodas de Plata de la Hermandad, teniendo una gran cantidad de actos y cuya obra social fue la construcción de una guardería infantil que se ubicó en el Convento de Madre de Dios. Se trabaja para mejorar los cultos, un ejemplo reseñable para mejorar la Romería fue la donación de los terrenos que se encontraban frente a la Ermita, lo que hoy se conoce como el parque y en el que posteriormente se planta arboleda para conseguir sombra. La Hermandad tuvo que enfrentarse al problema más grave y espinoso que ha tenido en los más de 70 años de existencia: las obras de restauración en el Santuario, que presentaba graves problemas estructurales y que comportaría la pérdida de gran parte del edificio, siempre priorizando la conservación de la Fuente Santa y cuanto se pudiera del edificio.
En los años 80 hemos de reseñar que se modifica el Altar de Novena elevando a la Virgen a la parte superior. Además, se incluye en los cultos la celebración comunitaria del Sacramento de la Penitencia en los días previos a la Novena. Los últimos años de esta década se centran en preparación y puesta a punto de todo lo relacionado con la Coronación Canónica de la Santísima Virgen de Gracia, que tendría lugar el 15 de septiembre de 1990, coincidiendo con el VII centenario del hallazgo de la Sagrada Imagen. En dicho año y con tal motivo se celebran una Misión General por la ciudad, una exposición Iconográfica y del Tesoro de la Virgen en la Puerta de Sevilla. Como obra social se lleva a cabo la construcción del nuevo templo parroquial de Nuestra Señora y San Fernando (San Antón). En dicho año también se celebra por primera vez el Triduo de Mayo en honor a nuestra Madre y Patrona, que continúa hasta el día de hoy.
En la última década del milenio se ha de destacar la adquisición y restauración de un Trono de Plata perteneciente al Convento de Concepción, que se adapta para que fuera la nueva Carreta del Simpecado. También, se recupera la vieja tradición carmonense de realizar un petitorio popular para sufragar los gastos de la Novena. Esta década finalizará con la celebración del L aniversario de la fundación de la hermandad.